jueves, 17 de abril de 2014

La derrota necesaria

Y sí, ha sido uno de esos partidos que tal vez no debiste perder. Al menos, no de esa manera: con una galopada impresionante de un chaval anónimo (haya costado lo que haya costado), ante un renqueante héroe inesperado, a cinco minutos del final, con Pinto entregado de piernas abiertas… No, no merecías perder así.

Pero el fútbol es cruel contigo. Siempre, casi siempre. ¡Tu año de gloria fue producto de un zapatazo! Y claro, precedido de un mal "despeje blue" que Messi dominó, cedió e Iniesta certificó. Ahí la suerte te sonrió. Neymar e Iker, hoy, por su parte, recordarán ese balón al poste: de mala suerte para uno, de buena para el otro. Casillas y su particular ángel, como siempre, el que también los mantuvo en Suráfrica. ¿O será otro? No, es el mismo, el de siempre, el de Iker... El que nos maravilla, el que nos reconforta cuando lo vemos levantar un trofeo. Aunque no estemos con su equipo, lo respetamos y valoramos y eso tiene un precio distinto... Solo Xavi, Iniesta y otras veinticuatro personas lo comprenden y viven así. ¿Preguntas al respecto? Consulten a Mourinho.


Y así es la historia del fútbol: de momentos... Para Martino es mucho castigo, para Ancelotti demasiado triunfo. 


Pero quería yo hablarles del Barsa y su necesaria derrota, la que te dice: ¡hasta aquí! ¡no damos más! ¡no hay nada nuevo en nosotros! Y sí, la derrota que duele hasta el tuétano. Por eso mismo, porque la sentías cercana, "pero todavía no", la sentías encima tuyo "pero todavía no"... "Un partido más, una eliminatoria más, una jornada más, una final más" Siempre pensando que irías más allá; pero hoy no hubo más allá.


Si lo vemos con sinceridad y ánimo de verdad, no ha pasado gran cosa. Sólo darnos cuenta que llegó la derrota necesaria... ¿Y ahora qué?

 Por José Miguel Goñi

No hay comentarios.:

Publicar un comentario